Jueves 28 de noviembre, apenas amanecía y los choferes ya arrancaban las camionetas, listos para recorrer varios cientos de kilómetros en busca de los promotores de las diferentes comunidades para traerlos y que pudieran participar, junto con los demás colaboradores del Departamento de Salud, de lo que sería la última capacitación del año.
La disertante invitada: Lic. Pia Dück de Marín. Los temas elegidos: Hipertensión Arterial y Desnutrición Infantil. Dos grandes problemas con los que se convive a diario en el Sanatorio ASCIM y de los que no se puede dejar de hablar, dos asuntos de salud que tienen que ver directamente con la alimentación, o mejor dicho con la mala alimentación. Por un lado, exceso de sales, azúcares y grasas saturadas y por otro, una marcada carencia de nutrientes esenciales (vitaminas, minerales, carbohidratos, proteínas y grasas). Es que a menudo así somos, abusamos de algunas cosas, al grado de perjudicarnos a nosotros mismos y dejamos otras necesarias para funcionar bien, como personas, como sociedad.
Pero esto de la buena alimentación no es cuestión exclusiva del cuerpo, también lo es del espíritu, y por eso, entendemos que estas actividades también son propicias para tener un tiempo de alabanza y reflexión bíblica, y no fue mera coincidencia que el Pr. Ramón Vera hablara de aquel famoso pasaje en Juan 6 que conocemos como el milagro de la alimentación de los cinco mil.
De lo aprendido y fijado en esta capacitación bastaría, quizás, con preguntarle a cualquiera de los más de 40 participantes quienes con, sonrisa y foto de por medio, recibieron su certificado al término de la misma.
Aunque una parte, se pudiera resumir y muy bien, con el sabio consejo de uno de los discípulos de Jesús: “Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación…”.
Hasta el año que viene, Dios mediante.